La fusión se acerca, y los focos están puestos inevitablemente sobre Ethereum 2.0. Pese a no estar celebrando un nuevo máximo histórico en cuanto al valor en mercado, la blockchain está volviendo a ser el centro de atención gracias a la inminente llegada de la próxima fase de su actualización: el “Merge de Ethereum”, de ahora en adelante, la fusión.
El paso de Proof-of-Work a Proof-of-Stake al que se someterá Ethereum, supone un gran cambio no solo para la red, sino para todo el ecosistema. Hasta ahora, habrás podido ver muchas previsiones de expertos en finanzas analizando cuál será el efecto de la fusión de Ethereum sobre el precio del token, sin embargo, en esta ocasión abordaremos principalmente en qué consiste y qué podemos esperar de la gran actualización de Ethereum 2.0.
Nota: Ethereum 2.0 es la forma popular aunque errónea de referirse a la nueva versión PoS de Ethereum.
¿Qué es la fusión de Ethereum y por qué se llevará a cabo?
Para poder hablar de la fusión, primero debemos entender por qué es necesaria. Ethereum, al igual que otras blockchains como Bitcoin o Monero, es una blockchain cuyo mecanismo de consenso está basado originalmente en Proof-of-Work (PoW) o Prueba de Trabajo.
Una de las principales desventajas del PoW, reside en la alta capacidad computacional que necesita un minero para poder competir por resolver el problema matemático y así ser el primero en minar un bloque y recibir recompensas. Para poder visualizar mejor la cantidad de energía que consume la red de Ethereum, esta iguala a países como Holanda en cuanto a gasto energético. Sin embargo, con el cambio a PoS, este consumo de energía podría reducirse incluso en un 99,5 %.
Como solución al problema del alto consumo energético, a los altos costes de la red y a las dificultades en cuanto a escalabilidad, Ethereum apostó por preparar la red para una actualización progresiva hacia el mundo PoS, empezando por el lanzamiento de la conocida Beacon Chain.
¿Qué es Beacon Chain?
Desde 2020, ya existe una cadena PoS de Ethereum: la Beacon Chain. Actualmente, esta cadena corre paralela a la mainnet de Ethereum e incorporará la capa de consenso PoS a Ethereum una vez se fusione con la mainnet.
Al contrario de lo que se cree, no se creará una blockchain Ethereum 2.0 para hacer posible el cambio de PoW a PoS, tan solo se intercambiará la capa de consenso PoW actual de la red por la capa de consenso PoS que incorporará Beacon Chain. Esta capa está formada por los distintos clientes de consenso, como Prysm, Teku, Nimbus, Lighthouse, Lodestar, que correrán el algoritmo que permitirá a la red alcanzar el consenso a la hora de validar transacciones. Por otro lado, se encuentra la capa de ejecución de Ethereum, que es la encargada de procesar y ejecutar las transacciones de la red, que se mantendrá intacta.
Fuente: Ethereum.org
Una vez entendido esto, podemos definir la fusión como la actualización mediante la cual la blockchain de Ethereum cambiará su capa de consenso de PoW por la de un mecanismo de consenso PoS. El principal objetivo de la migración es hacer de la blockchain de Ethereum una cadena más sostenible, escalable y segura.
Ethereum cree, sin duda, que el mecanismo de consenso Proof-of-Stake tiene lo que se necesita para ayudar a lograr su visión y poner fin a las deficiencias actuales. Sin embargo, la mayoría de los cambios en la blockchain de Ethereum no se aplicarán al instante, puesto que la fusión constituye tan solo una fase de todo el proceso.
Fases de la actualización de Ethereum
Fase 0: Lanzamiento de Beacon Chain
Fase completada. El lanzamiento de Beacon Chain tuvo lugar el pasado mes de diciembre de 2020. Desde entonces, se han creado miles de validadores dispuestos a asegurar la red de Ethereum con sus respectivos ETH en staking. Para montar un validador en Beacon Chain son necesarios exactamente 32 ETH, los cuales no se podrán retirar hasta que se habilite tal opción tras la fusión.
Fase 1: La Fusión o The Merge
Fase inminente, prevista para agosto/septiembre de 2022. El Merge de Ethereum consistirá en la fusión de la red principal con Beacon Chain, que supondrá la transición final de Proof-of-Work a Proof-of-Stake, y por tanto la eliminación total de PoW en la blockchain de Ethereum. Para ello, ya se han realizado simulaciones de la fusión en redes de pruebas de Ethereum, que han permitido al equipo corregir errores y pulir la transición. Las últimas simulaciones de fusión que se realizaron con éxito fueron la testnet Ropsten (8 de junio de 2022) y la recién lanzada testnet de Sepolia (6 de julio de 2022). Aunque aún estamos a la espera de la última simulación donde se fusionarán las testnets Goerli y Prater, el paso siguiente será por fin la fusión de la Beacon Chain con Ethereum.
Una vez finalizada la fusión, los validadores seguirán generando recompensas por cada bloque validado; sin embargo, no será hasta después de la actualización denominada Shanghai que se podrán transferir o retirar los ETH en staking, que hasta ahora permanecían bloqueados. Para evitar una huida masiva de validadores, tan solo se podrán desmontar 6 validadores (con 32 ETH en staking) por cada época o epoch, periodo equivalente a 6,4 minutos.
Fase 2: Fragmentación o Sharding
Fase prevista para 2023. La fase de sharding, traducido al español como fase de fragmentación, se gestionará por etapas y aliviará finalmente la congestión de la red e incrementará el número de transacciones por segundo, aunque aún continúan perfeccionando el proceso. Inicialmente, se planeó la fragmentación horizontal de la base de datos de Ethereum en 64 cadenas; de esta forma, las transacciones serían mucho más fáciles de procesar y se distribuiría de forma eficiente la carga de la red.
Los validadores, en lugar de gestionar las transacciones teniendo en cuenta el histórico de datos de toda la blockchain, validarían las transacciones por fragmentos independientes, llamados shards, lo cual suponde una menor carga y un mejor rendimiento.
Estos fragmentos se comunicarían directamente con Beacon Chain, que se encargaría de coordinar las cadenas y almacenar la información que reciba de cada una de ellas. De esta forma, tendrían siempre acceso a una base de datos actualizada y la red sería mucho más eficiente y escalable.
Diagrama original de Hsiao-wei Wang, diseñado por Quantstamp. Fuente: vitalik.ca
Sin embargo, a medida que se descubren nuevas vías de escalabilidad, el método sharding continúa evolucionando. Uno de los principales problemas del sharding consiste en la falta de comunicación entre las distintas cadenas que componen la red, lo cual da pie a muchas vulnerabilidades. Por ello, la primera versión de sharding 1.0 quedó obsoleta y dejó paso al danksharding, y por último al proto-danksharding.
A diferencia del sharding, donde los validadores trabajan sobre subcadenas independientes (shards) y proponen bloques directamente a la Beacon Chain sin comunicarse previamente entre ellas, el danksharding gira en torno a los protocolos rollup de capa 2 y al EIP-4844, una novedad que añade un nuevo tipo de transacción con blobs. Estos blobs consisten en contenedores de datos mucho más baratos que se añaden a las transacciones para así abaratar el coste por transacción. A pesar de que esta solución aumente el tamaño de los bloques considerablemente, consigue que las transacciones sean hasta 10 veces más rápidas y más baratas.
Los rollups son los protocolos destinados a enrollar las transacciones enviadas por los shards y hacer una única transacción hacia la Beacon Chain. De esta forma, Ethereum tan solo debe procesar una transacción y aumenta la velocidad de transacciones y reduce el coste.
En esta nueva solución, los shards y la Beacon Chain se encuentran en una capa 1, mientras que los protocolos rollup se ejecutan en una capa 2. En danksharding, en lugar de que cada shard envíe sus transacciones directamente a la Beacon Chain, se envían al rollup de capa 2. Estos rollups se encargan de recibir, agrupar y enviar la información directamente a la Beacon Chain en una sola transacción. Esto, además de permitir la fragmentación de la red, conlleva una mayor cantidad de datos procesados y a su vez la interconexión de las distintas subcadenas que la conforman. El objetivo principal del danksharding es conseguir que la capa 2 facilite la cantidad de transacciones que se puedan procesar y abarate el coste de transacciones de la red de Ethereum.
Más tarde, Vitalik Buterin propuso el proto-danksharding como nueva propuesta de mejora del danksharding. Pese a que ya se habrá implantado anteriormente la solución de los blobs de datos (EIP-4844), no se trata más que de una solución a corto plazo. No será hasta el proto-danksharding cuando se termine de perfeccionar la funcionalidad de las transacciones con blobs.
Qué esperar de la fusión de Ethereum
Las expectativas sobre los cambios en la blockchain podrían variar dependiendo de la fase en la que nos encontremos, aunque en esta ocasión, nos centraremos en la fusión. A continuación, destacaremos lo que se espera tras la fase de fusión de Ethereum:
Transacciones más rápidas. La velocidad de procesamiento de transacciones aumentará tras comenzar la fase de danksharding, lo que a su vez hará que la capacidad de la red de procesar transacciones sea aún mayor.
Mayor seguridad. Ethereum cuenta con más de 400 000 validadores, que a su vez usan diferentes clientes de consenso, haciendo posible una mayor descentralización de la red. Se trata de una cifra muy significativa teniendo en cuenta que Solana, pese a ser una red PoS desde el inicio, cuenta con alrededor de 1800 validadores.
Mayor adopción de Ethereum. El cambio al mecanismo de consenso PoS y el aumento de la capacidad de carga de la red facilitará la construcción de más proyectos sobre la blockchain de Ethereum. Hasta ahora, hemos podido ver como grandes proyectos nacidos en la blockchain de Ethereum terminaban construyendo su propia red debido a que Ethereum se encontraba ya en su máximo de capacidad.
Reducción del consumo de energía. Un factor favorable de cara al medioambiente y que podría favorecer la adopción de la red de cara a organismos y empresas tradicionales.
Desmintiendo bulos sobre la fusión de Ethereum
A raíz de la cantidad de información que hay acerca de la fusión de Ethereum en Internet, es posible que hayas podido encontrar ciertos bulos que nos gustaría aclarar. A continuación, desmentiremos algunos de los bulos que han recorrido las redes durante estos meses y resolveremos cualquier duda que puedas tener.
"La fusión de Ethereum reducirá los precios del gas de la blockchain"
No, la fusión de Ethereum como tal no aplicará una reducción en el precio del gas de la blockchain, en contra de la creencia popular. La fusión constituye tan solo una fase entre las diferentes etapas de actualización de la blockchain de Ethereum. Sin embargo, la rapidez de procesamiento y la eficiencia de la red como consecuencia de la actualización total de la red al consenso PoS acabará resultando en una reducción de los costes por transacción, ya que se agiliza el proceso por el que se tramitan las transacciones.
"La fusión de Ethereum dividirá la blockchain y habrá un nuevo token ETH2"
Inicialmente, la actualización fue etiquetada como ETH 2.0. Sin embargo, en enero de 2022, la Fundación Ethereum decidió cambiar el nombre a "Ethereum" para evitar que los usuarios pudieran caer en posibles campañas fraudulentas. Presta siempre atención y fíate solo de fuentes oficiales, la fusión solo actualizará la blockchain de Proof-of-Work a Proof-of-Stake, pero no habrá nuevos tokens ni se hará ningún fork de la red. No será necesario cambiar los tokens ni realizar ningún tipo de operación por parte del usuario para que se lleve a cabo la actualización.
"La blockchain de Ethereum ha fijado una fecha concreta para la actualización"
No exactamente. Pese a las especulaciones de las numerosas fuentes de información, recomendamos consultar únicamente fuentes oficiales. Se espera que se produzca entre finales de agosto y septiembre, según la página web de Ethereum.
Conclusión
Con una fase de fusión inminente, la red de Ethereum acapara gran parte de la atención de los usuarios. Una vez se apliquen los cambios, los beneficios propios de la fase de fusión serán notables prácticamente al instante. Ethereum pasará de ser una red no sostenible, poco escalable y costosa en cuanto al precio por transacción, a una red respetuosa con el medioambiente, pensada para ser escalable y mucho más económica, gracias a la reducción del coste por transacción.
¿Tendrá la actualización un impacto en la cotización del token ETH? ¿Será este el inicio de una oleada de aplicaciones descentralizadas que aterrizarán sobre la red de Ethereum? Son incógnitas que todos nos preguntamos, pero tendremos que seguir esperando para ver qué ocurre. Mientras tanto… ¡Puedes unirte al staking de ETH para amenizar la espera, incluso si no tienes 32 ETH!